Algunas personas buscan de manera desesperada la aprobación externa, pero se olvidan que está afectando gravemente su autoestima y confianza, por ende su día a día, porque dime, quien vive tranquilo con la necesidad constante y sonante de sentirse aceptados por todo el mundo, si te sientes identificado este artículo es para ti.
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Eres de los que excesivamente está buscando, amor, amistad y aceptación acostó, de la indiferencia, malos tratados o abusos, porque si muchas veces sin darnos cuenta creemos que esas actitudes son las "correctas" pero se nos olvida que haya afuera hay muchas personas con intenciones no muy positivas hacia ti.
El día de hoy quiero que te orientes en leer con mucha atención las 5 pautas que te revelaré que es el foco principal de la necesidad casi adicción de querer sentirnos aprobados. quedate y comparte este artículo a quien le puede ser de ayuda.
¿Qué hay de malo en complacer a los demás?, no hay nada malo en querer ayudar por voluntad propia alguien que lo necesita, en efecto querer estar ayudando constantemente pasa una factura muy cara hacia nuestra autoestima y ponemos sin darnos cuenta las necesidades de los otros por encima de las nuestras.
Ya con el tiempo esta acción de ayudar se vuelve en la necesidad de aprobación, es un círculo vicioso y las personas no harán nada por demostrar el erróneo de tu actuar, al contrario, para ellos es muy benéfico porque estás dependiente a las opiniones y decisiones que dan ellos, y es allí donde tú quedas en jaque.
Con tal de que ya reconozcas con plena consciencia esa adicción a la aprobación externa, y ganar de nuevo confianza, seguridad y autonomía, vamos a conocer las siguientes pautas para que las pongas en práctica lo más pronto.
1. No asumas que los demás te etiqueten de un extremo al otro.
Cuando vas en contra de la opinión o posición del otro, es muy probable que te etiqueten de mil maneras a modo negativo, por ejemplo está el hecho de que te compraste unos chocolates para ti y tú quieres comértelos solo o sola en tu habitación.
Te descubre alguien comiéndolos, y de una vez te catalogan como una mala persona, egoísta o mezquina, cuando no lo eres, todos estamos en nuestro derecho y libertad de si queremos o no compartir con alguien.
Entre más eres fiel a tus decisiones y modo de ser, te respetarán, nadie, pero nadie tiene el derecho de juzgaste, más que tu mismo porque tu pones tú reglas sobre tu actuar y convicción.
2. Di lo que piensas
Cabe destacar que en muchas ocasiones hay que pensar antes de actuar, aquí no es que vayas opinando a diestra y siniestra, porque así como exiges respeto también respeta, vivimos en sociedad y hay maneras más inteligentes de confrontar una opinión con la cual no estés de acuerdo.
Puedes claro que si, agradar a los demás sin faltarte el respeto, si no reflexionas y no expresas eso que tienes que decir a los otros ya tienen el poder sobre ti.
3. Regla indestructible, hagas lo que hagas siempre vas a defraudar alguien
4. Complacete a ti mismo
Saber que buscar esa aceptación constante nos mete en un bucle de preocupación por mantener una opinión favorable para los demás, y es necesario casi vital, de vez en cuando aprobarnos a nosotros mismos.
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